miércoles, 4 de octubre de 2017

IMITACIÓN DE CRISTO CAPÍTULO XV

Capítulo XV
OBRAS HECHAS
 POR AMOR.

1. Por ninguna cosa del mundo ni por deferencia a alguna persona debe hacerse algo malo, pero por utilidad de un necesitado debe interrumpirse la buena obra, o cambiarla por otra mejor. Esto no significa que la buena obra quede destruida sino que se ha convertido en más buena. Sin amor, las actividades exteriores de nada sirven; pero lo que se hace por amor así sea muy pequeño y despreciable llega a ser muy fructífero. Más considera Dios a la persona que realiza la acción que a la acción realizada.

2. Mucho hace el que mucho ama. Mucho hace quien hace las cosas bien. Hace bien quien sigue el parecer de su Comunidad en vez de su propia voluntad. A veces parece ser amor y es más bien sensualidad porque las tendencias de la naturaleza, la propia voluntariedad, la esperanza de la retribución y la atracción de las comodidades muy rara vez nos abandonan.

3. El que tiene verdadero y perfecto amor, en nada busca su propia gratificación, sino desea únicamente que Dios sea reconocido y recibido por todos. A nadie otorga la propiedad de ningún bien sino que los atribuye íntegramente a Dios ya que de Él todos brotan como de una fuente y finalmente todos los santos gozarán descansando en Él. Si alguien tuviera una pequeña chispa de verdadero amor, de inmediato sentiría que las cosas materiales están todas vacías.